Potaje de garbanzos con bacalao.
El bacalao
al ser uno de los alimentos “permitidos” en época de Cuaresma, ha convertido a
este potaje en el rey de la vigilia y, para los menos católicos, en el obligado
a hacer en esta temporada, como el pavo en Navidad.
Este plato,
como tantos otros, tiene variaciones para dar y regalar, por zonas geográficas,
costumbres familiares, tradiciones y un largo etcétera. Yo os voy a mostrar la
receta que hago en casa, es sencilla y muy rápida de hacer, incluso cuando se
te ocurre hacer el potaje a última hora, aunque todos sabemos que no hay nada
como el lento chup-chup.
INGREDIENTES (Para 4 raciones):
-400 grs. de bacalao desalado (yo lo compro
congelado).
-3 patatas grandes.
-1 diente de ajo laminado.
-1 cucharada de pimentón dulce.
-1 manojo de espinacas. (las podéis sustituir por
acelgas).
-200 grs. de garbanzos congelados.
-Agua, aceite de oliva y sal.
PREPARACIÓN:
En una olla
o puchero, ponemos un par de cucharadas de aceite de oliva y sofreímos el ajo
laminado con cuidado de no quemarlo.
Sofreímos el
bacalao a fuego medio y reservamos junto con el ajo.
En el mismo
aceite ponemos las patatas cortadas en trozos no muy grandes (3 o 4 cms.) y las
rehogamos hasta que empiecen a dorarse.
Separamos la
olla del fuego e incorporamos el pimentón, moviéndolo todo para que se sofría
sin quemarse.
Añadimos un poco de agua, tapamos la olla y mientras se cuecen
las patatas, desmigamos el bacalo, quitando las posibles espinas.
Incorporamos
los garbanzos y el bacalo.
Si vemos que
falta caldo, añadimos tan sólo lo justo para casi cubrir los ingredientes, no
hace falta más.
Rectificamos de sal y
añadimos por último las espinacas o acelgas, tapamos y dejamos cocer unos 5 minutos,
hasta que veamos la verdura hecha.
Dejamos reposar unos minutos
y listo. Cuidadito que quema.